La idea del “trabajo de tus sueños” es un tópico que se nos inculca desde la infancia, y una de las maneras de hacerlo es a través de películas o series. En ellas vemos como sus personajes consiguen trabajar en algo que les gusta y llena, de modo que se podría decir que este trabajo “los hace felices”.

El trabajo se nos presenta como un ámbito de la vida imprescindible para vivir en sociedad, no se puede no trabajar, ya que de esta manera la máquina del capitalismo deja de funcionar. Es por ello que al sistema le interesa establecer la idea de que dicho ámbito también puede ser algo que nos puede hacer felices, siempre que luchemos por nuestros sueños. Si el protagonista de la película lo consigue, tú también puedes conseguir todo lo que deseas, pero para ello tienes que trabajar duro y alimentar así al monstruo.

En la ficción un camarero siempre esta dispuesto a escuchar los problemas de un cliente, como si entrase en su sueldo, los médicos no tienen vida más allá del hospital y todo eso lo hacen por y para su família. Viven para trabajar, no trabajan para vivir. Nunca es suficiente.

En películas como; El diablo viste de Prada, High School Musical o series como Gossip Girl, que ocupan la primera pantalla de Netflix, podemos ver como se perdura esa idea. Las protagonistas hacen todo lo que pueden por conseguir el trabajo de sus sueños o más bien dicho en mucho de los casos, el trabajo que sus padres han soñado para ellas. Dejando por el camino instintos reales, sueños o vocaciones de verdad.
High School Musical 3, 2008
Gossip Girl, 2007-2012